La calidad educativa como pretexto

Pretexto. (Del lat. praetextus). 1. m. Motivo o causa simulada o aparente que se alega para hacer algo o para excusarse de no haberlo ejecutado.

Una Educación Primaria de carácter confesional, patriótico, social, intelectual, físico y profesional, que busca la unificación lingüística de todo el Estado y bendice la separación de sexos en las aulas. La definición bien podría corresponder al proyecto de Ley Orgánica de la Mejora de la Calidad Educativa, LOCME, aprobado hoy por el Consejo de Ministros. Sin embargo, corresponde a la Ley de Instrucción Primaria de 1939 aprobada inmediatamente después de la Guerra Civil por una dictadura de pensamiento nacional-católico y orientación fascistas que entendía la educación como un derecho de la familia, la Iglesia y el Estado.

El gobierno, de nuevo, juega con las palabras. Un título rimbombante al que es difícil oponerse –Mejora de la Calidad Educativa- esconde una reforma educativa que propone la vuelta a una educación monolingüe, en la que cobra valor la asignatura de Religión (Católica) y se financia la separación por sexos. Es decir, una educación segregadora, monolingüe y confesional en un país mixto, laico y plurilingüe.

Y en esta madeja ideológica, que no es gratuita, se pierde el hilo de la calidad educativa. ¿Cómo es posible mejorar la calidad educativa con menos recursos? Con menos presupuesto y menos profesores, sin atención a la diversidad y sin apoyo a las necesidades educativas especiales en las aulas, reduciendo las becas para libros, transporte y comedor.

La LOCME avanza hacia una educación clasista, excluyente, antidemocrática, adoctrinadora y mercantilista. Pero además, nace herida de muerte. Más allá de que establece un sistema de educación confesional. Si hay un clamor en la comunidad educativa, por encima de ideologías políticas, es que no cambie el sistema educativo cada vez que cambia el gobierno, que haya un consenso político fundamentado en un consenso social. Es la quinta reforma educativa en 28 años:

Ha llovido mucho desde que la Segunda República Española (1931-1939) estableció que la educación pública ha de ser gratuita, laica y mixta, sin separación de niños y niñas en las aulas; permitió que la enseñanza se practicara en lengua materna hasta los 8 años en la escuela, bien castellano o bien catalán. Sin olvidar el reconocimiento de la labor pedagógica, el papel fundamental de los maestros y maestras y el esfuerzo inversor para construir escuelas en todos los rincones del país.

El vídeo “La Comunitat Educativa Desperta” es de la Federación de Padres y Madres de Mallorca (FAPAMallorca)

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